El economista Salvador Di Stefano ganó relevancia en el último año por sus predicciones acertadas y análisis sobre el panorama económico argentino.
En una reciente entrevista en Radio con Vos, analizó los logros y desafíos del primer año de gobierno de Javier Milei. Además, destacando los efectos de las políticas macroeconómicas y los retos pendientes en el ámbito productivo.
«El ordenamiento macroeconómico es espectacular»
Salvador Di Stefano evaluó el año de Javier Milei
Di Stefano señaló que el cambio de modelo económico fue clave para estabilizar variables críticas. «Pasamos de un modelo de déficit fiscal financiado con emisión monetaria a uno con superávit fiscal, ingreso de capitales y sin endeudamiento externo», explicó.
Este giro permitió reducir la inflación anualizada del 161% en noviembre de 2023 al 118% en diciembre, con perspectivas de un 29% anual para los próximos 12 meses.
Otros indicadores también mostraron mejoras notables. «El riesgo país bajó de 2.000 puntos a 740, y la brecha cambiaria desapareció», afirmó. Además, destacó que las tasas de interés positivas contra la inflación benefician a los ahorristas en pesos.
Salvador Di Stefano y Javier Milei. | La Derecha Diario
El costo social del ajuste
Aunque calificó de «espectacular» el ordenamiento macroeconómico, Di Stefano reconoció el impacto social de las medidas adoptadas. «La sociedad está haciendo un esfuerzo enorme, pero lo está avalando porque entiende que es necesario para un futuro mejor«, comentó.
El economista también defendió el enfoque del gobierno en priorizar prestaciones sociales frente a otros rubros del gasto público. «Las prestaciones sociales bajaron un 17% en dólares, mientras que los subsidios cayeron un 30% y las transferencias a provincias y universidades disminuyeron más del 65%», precisó.
Además, detalló que hay una recuperación del poder adquisitivo de los jubilados del 10 por ciento en terminos reales.
Desafíos en el sector productivo
Mirando hacia adelante, Di Stefano identificó la falta de políticas específicas para sectores clave como la ganadería, el agro y la industria porcina. «No estoy viendo un acercamiento del gobierno para discutir los grandes temas sectoriales», comentó. Además, alertó sobre la necesidad de mejorar la competitividad de los productores locales frente a la importación y la devaluación de países vecinos como Brasil.
Sin embargo, también destacó oportunidades en áreas como la minería, el gas y el petróleo, donde ya se observan inversiones significativas. «San Juan y Neuquén están recibiendo un flujo de inversiones que sus economías locales no pueden abastecer«, señaló.
Un cambio estructural con perspectiva de crecimiento
Di Stefano calificó el cambio económico de «único en la historia argentina». Comparó la situación actual con períodos como la convertibilidad o el kirchnerismo y subrayó que nunca antes se había alcanzado un equilibrio fiscal sin recurrir a privatizaciones masivas o endeudamiento.
«Es un plan durísimo para la gente en el corto plazo, pero será muy satisfactorio a futuro porque generará trabajo e inversiones«, afirmó.
El economista proyectó que, con la llegada de inversiones, los niveles de empleo formal podrían incrementarse significativamente. Esto redundaría en una mejora de los ingresos jubilatorios y una reducción de la pobreza.
Para Di Stefano: «Si el próximo presidente mantiene este régimen, la Argentina va por buen camino», aseguró.
El economista se muestra optimista sobre el potencial de estas transformaciones para consolidar un crecimiento sostenible. «La espera puede ser dura, pero este es el camino para que el país recupere la estabilidad y las inversiones que tanto necesita», concluyó.
Fuente: Derecha Diario