Los miembros del Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC) de la Reserva Federal de Estados Unidos (FED) anunciaron un recorte de tasas de 50 puntos básicos en una medida que busca potenciar la economía de cara a las elecciones del próximo 5 de noviembre.
Con una medida a la que muchos expertos catalogan de “temeraria”, la Fed, influenciada por el Gobierno de Biden, busca darle un empujón a una economía que estaba empezando a mostrar signos de recesión por el incremento de la tasa de desempleo al 4,2%.
Cuál puede ser el impacto de la medida
La política monetaria de la Reserva Federal juega un papel crucial en la economía de Estados Unidos, y una de sus herramientas más poderosas es la tasa de interés. Cuando la FED decide bajar las tasas, su objetivo principal es estimular la actividad económica.
Esta medida puede tener un impacto positivo en diversos sectores, lo que a su vez podría favorecer las chances electorales del oficialismo, especialmente si el crecimiento económico y la creación de empleo mejoran en el corto y mediano plazo.
Una baja en las tasas de interés tiene un efecto directo sobre el costo del crédito. Al reducir el precio de los préstamos para empresas y consumidores, se incentiva la inversión y el consumo.
Las empresas suelen aprovechar estos momentos para tomar préstamos a bajo costo, financiar expansiones o nuevos proyectos, lo que genera más empleos y aumenta la productividad.
Al mismo tiempo, los consumidores también se ven motivados a gastar más, ya sea adquiriendo viviendas, automóviles o invirtiendo en bienes de consumo duradero. Todo este movimiento produce un aumento de la demanda interna, lo que alimenta el crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB).
En un contexto electoral, una economía pujante es un fuerte aliado del partido en el poder y esta medida apunta a mejorar las chances electorales de Kamala Harris, ya que las encuestas empiezan a mostrar que habrá una segunda presidencia de Donald Trump.
Si la FED logra estimular el crecimiento económico con una reducción de tasas, el oficialismo podría capitalizar los logros económicos para mejorar su imagen ante el electorado.
A nivel histórico, las elecciones en Estados Unidos han estado influenciadas por la percepción que tienen los votantes sobre la economía. Un ciclo de crecimiento sostenido, con un desempleo en baja y una inflación controlada, es favorable para los partidos que buscan mantener el poder, ya que los ciudadanos tienden a respaldar a quienes asocian con un buen manejo de la economía, aunque en este caso se dé de manera artificial.
Otro factor que podría jugar a favor del oficialismo demócrata es el impacto en los mercados financieros. Las tasas más bajas suelen estimular la compra de acciones, ya que los inversores buscan rendimientos más atractivos que los que ofrecen los bonos y otros instrumentos de renta fija.
Un mercado bursátil en alza contribuye a generar un clima de confianza económica y mayor bienestar, lo que también influye en las decisiones de los votantes.
Sin embargo, no todo es positivo en el largo plazo. Si bien la reducción de tasas puede generar un impulso económico inmediato, también podría traer consigo riesgos inflacionarios si no se gestiona con cautela.
Fuente: Derecha Diario