Desde la Federación de Industrias Frigoríficas Regionales Argentinas (FIFRA), que representa a numerosos frigoríficos locales y promueve el desarrollo de la industria cárnica argentina, se indicó que no se prevén aumentos en el precio de la carne para los próximos meses.
Esta afirmación refleja una tendencia positiva en el contexto económico nacional.
Pese a ciertos indicadores del mercado, el valor de la hacienda mantuvo una estabilidad notable, lo que sugiere que cualquier ajuste en los precios podría ser más gradual y reflejarse hacia finales de 2024.
Esta estabilidad en los precios, algo que no se veía hace muchos años en el país, es un claro indicio de que las políticas económicas implementadas por el Gobierno de Javier Milei continúan dando resultados.
Debido al “Massazo“, la crisis económica kirchnerista heredada por Milei, la industria frigorífica enfrenta desafíos, con una demanda que aún no muestra muchos signos de recuperación.
Sin embargo, el sector se mantiene optimista y no espera un aumento abrupto de precios en el corto plazo. Esta postura contrasta con las expectativas de los productores ganaderos, quienes, a pesar de los retos, ven cómo sus ingresos se estabilizan gracias a las medidas adoptadas por el gobierno, que logró reducir la inflación y detener la caída de la economía.
Un reciente informe de la Asociación Argentina de Angus destacó un precio de $3.750 por un lote de terneros de 180 kilos, un valor superior a los promedios habituales. Sin embargo, los frigoríficos no prevén un fuerte incremento en los precios a corto plazo, lo cual es positivo en un contexto donde el Gobierno logró contener la inflación.
Daniel Urcía, presidente de FIFRA, señaló que “el consumo de carne ajusta por precios y hasta fin de año no habría mejoras en los valores de la carne y del ganado“. Sin embargo, además de remarcar que no habrá aumento en los precios, destacó que “los precios de las carnes atrasan con respecto a la inflación y colaboran para que el indicador baje, más allá de las correcciones que hace el gobierno en la economía”.
Y añadió: “Desde FIFRA seguimos trabajando con las autoridades para mejorar el funcionamiento de la cadena“, lo que demuestra el impacto positivo de las reformas económicas en la estabilidad de los precios.
“Al analizar el desarrollo del año, observamos que en los primeros ocho meses se faenaron 9 millones de bovinos y 5,5 millones de porcinos, con un mercado interno que se ajusta por precios, pero con consumidores muy interesados“, señala el presidente de FIFRA.
“Este ajuste por precios se evidencia en el retraso de los valores de los cortes de carne en relación a la inflación. Como resultado, las cotizaciones de los animales en pie también comienzan a estar desfasadas en comparación interanual, lo que sugiere que podría haber una recuperación de precios al final del año, simplemente por inercia de la economía”, añadió, aclarando que no se analizan nuevos aumentos en el corto plazo.
Fuente: Derecha Diario