Durante el violento paro nacional convocado por los mafiosos gremios del transporte, algunos empleados públicos y agrupaciones sociales, un grupo de manifestantes de la Unión de Trabajadores de la Economía Popular (UTEP) intentó realizar un piquete frente a una sede de Mercado Libre (ML), pero fue exitosamente reprimido por las fuerzas federales.
El depósito, ubicado en La Matanza, había sido ilegalmente clausurado por el municipio ultra-kirchnerista debido al supuesto incumplimiento de “normativas locales“.
Días antes, un grupo de referentes libertarios liderados por el diputado José Luis Espert había intentado reabrirlo, lo que desencadenó una protesta en defensa del empresario Marcos Galperín, quien tiene afinidad con el Gobierno de Javier Milei e intenta activamente realizar inversiones para generar empleo privado.
En la tarde del miércoles, los violentos manifestantes llegaron al barrio de Villa Celina con la intención de realizar un piquete cerca del local de la empresa de ventas online, momento en el cual la Gendarmería Nacional Argentina (GNA) intervino empujándolos para disolver la violenta protesta, utilizando gas pimienta para dispersarlos.
La ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, había advertido previamente que se aplicaría estrictamente el protocolo antipiquetes en las movilizaciones anunciadas por diversos gremios y organizaciones.
En este contexto, efectivos armados y protegidos con escudos forzaron a los delincuentes hacia la vereda, lanzando gases. Algunos manifestantes se desplazaron hacia la avenida General Paz, seguidos de cerca por los gendarmes que los rociaron gas pimienta.
“Estaban los compañeros de la UTEP, llegó la Gendarmería y empezó a las piñas y patadas. Le tiraron gas a una compañera a 30 centímetros de distancia. Después, se tranquilizó la situación“, relató a los medios Patricia Cubria, una de las delincuentes presentes en el piquete y referente del Movimiento Evita e integrante de la UTEP.
Las pérdidas económicas del paro
El la pérdida es de 151 millones de dólares, explicaron desde el Gobierno de manera explícita, y se atribuyó principalmente a un déficit de 286 millones de pesos en trenes de pasajeros, 1.100 millones de pesos en trenes de carga y 458 millones en terminales de ómnibus en la Provincia de Buenos Aires, entre otros ítems.
De acuerdo con los datos del Ministerio de Seguridad, en este miércoles se registraron 1.382 denuncias telefónicas por extorsiones de los gremios. Desde el relanzamiento de la línea 134 en diciembre pasado, ya se contabilizan más de 220.331 llamadas.
Mientras el Gobierno de Milei busca avanzar en el Congreso con la privatización de Aerolíneas Argentinas y lanza críticas hacia Biró, desde el Ejecutivo informaron que el paro obligó a cancelar 250 vuelos, afectando a un total de 27.000 pasajeros, la mayoría de ellos (21,000) en vuelos de cabotaje. 14.000 pasajeros tuvieron que ser reubicados en vuelos anteriores o posteriores.
Fuente: Derecha Diario