La empresa china TP-Link, líder en el mercado estadounidense de routers para hogares y pequeñas empresas, enfrenta una posible prohibición en Estados Unidos debido a preocupaciones relacionadas con la seguridad nacional.
Según informes de The Wall Street Journal, las autoridades investigan si estos dispositivos, utilizados en ciberataques recientes, representan un riesgo significativo.
Acusaciones de vulnerabilidades y ciberataques
Microsoft ha identificado miles de dispositivos TP-Link comprometidos en ataques dirigidos a instituciones gubernamentales, grupos de reflexión y proveedores del Departamento de Defensa.
A pesar de que las vulnerabilidades en routers no son exclusivas de esta marca, TP-Link ha sido criticada por no colaborar activamente con investigadores de seguridad para solucionar los problemas detectados.
administración Biden evalúa esta medida en el marco de una estrategia más amplia para contrarrestar ciberataques vinculados a China | La Derecha Diario
El Departamento de Comercio, junto con los de Defensa y Justicia, lidera una revisión que podría culminar en la prohibición de las ventas de TP-Link en EE.UU. La administración Biden evalúa esta medida en el marco de una estrategia más amplia para contrarrestar ciberataques vinculados a China, continuando con políticas implementadas durante la presidencia de Donald Trump, como la exclusión de Huawei de la infraestructura estadounidense.
Impacto en el mercado y las tensiones geopolíticas
TP-Link domina el 65% del mercado estadounidense de routers y ganó terreno durante la pandemia, ofreciendo dispositivos a precios competitivos. Sin embargo, la empresa enfrenta acusaciones de prácticas anticompetitivas y preocupaciones sobre su conexión con el gobierno chino.
Taiwán ya ha prohibido el uso de routers TP-Link en instituciones gubernamentales, y la India emitió advertencias sobre sus riesgos de seguridad.
En Estados Unidos, un comité del Congreso instó al Departamento de Comercio a investigar las vulnerabilidades de seguridad de TP-Link, mientras que una ley aprobada por la Cámara de Representantes busca evaluar los riesgos que representan los routers de fabricantes vinculados a adversarios extranjeros.
Respuesta de TP-Link y China
TP-Link ha negado las acusaciones y manifestó su disposición a cooperar con el gobierno estadounidense para garantizar el cumplimiento de los estándares de seguridad. “Estamos comprometidos con los consumidores estadounidenses y en responder a cualquier preocupación de seguridad nacional”, declaró una portavoz de la empresa.
Por su parte, la embajada china en Washington acusó a Estados Unidos de utilizar la seguridad nacional como pretexto para reprimir a empresas chinas.
Una posible reconfiguración del mercado
Una prohibición de TP-Link podría transformar el mercado de routers en EE.UU., donde empresas locales han perdido terreno frente a competidores chinos. Expertos señalan que el problema de la seguridad en la cadena de suministro es sistémico y requiere soluciones integrales, más allá de medidas puntuales contra empresas específicas.
Fundada en Shenzhen en 1996, TP-Link ha intentado desvincularse de su origen chino en medio de las tensiones geopolíticas. En octubre, la empresa anunció que trasladará su sede a California, aunque las autoridades estadounidenses mantienen dudas sobre su relación con China.
El desenlace de esta investigación podría tener implicaciones significativas no solo para TP-Link, sino también para la política tecnológica y comercial entre Estados Unidos y China.
Fuente: Derecha Diario